Beneficios de comer cebolla cruda para la salud

La cebolla adelgaza

Además de estos componentes, la cebolla contiene otras sustancias no menos importantes, como aceite esencial (similar al que contiene el ajo), ácido fosfórico y cítrico, quercetina, diversas enzimas y flavonoides.

Un estudio de 2010 publicado en Molecular Aspects of Medicine destacó sus efectos beneficiosos para el corazón. Los compuestos azufrados de esta verdura ayudan a diluir la sangre. Este mecanismo previene los accidentes cerebrovasculares y los infartos de miocardio.

Los vegetales del género Allium y sus compuestos tienen efectos en todas las fases de la carcinogénesis e influyen en muchos procesos biológicos que modifican el riesgo de cáncer. Comer cebollas a diario ayuda a prevenir un gran número de cánceres. (15)

Cuando cortamos una cebolla cruda, debido a la alinasa, se forman algunos compuestos inestables que tienden a degradarse rápidamente. Los compuestos que se forman al final de este proceso de degradación son los responsables de su característico aroma que provoca lagrimeo.

Beneficios cebolla roja cruda

Aunque es un alimento no pesado y de fácil digestión, su componente aromático, que caracteriza su sabor, es el aspecto que disuade a muchas personas de consumirlo. Sin embargo, para evitar problemas de mal aliento, existen algunos «trucos» transmitidos por la cultura popular que consisten en quitar el corazón, es decir, el brote interior de la hortaliza, o remojar la cebolla picada en leche (el remojo en agua, en cambio, parece ser útil para evitar el lagrimeo de los ojos). Pruébalo para creer.

Contraindicaciones de la cebolla

Las cebollas crudas son bajas en calorías; contienen sólo 40 calorías por cada 100 gramos de porción comestible, son un 89% agua, un 9% hidratos de carbono y sólo un 1,7% de fibra. Prácticamente nula, en cambio, es la ingesta de grasas y proteínas. En cuanto a los micronutrientes, las cebollas contienen potasio, fósforo, vitaminas del grupo B y compuestos antioxidantes, como detallaremos en el siguiente apartado. A continuación encontrará una tabla con los valores nutricionales de las cebollas.

Estudios en animales, pero también en humanos, han demostrado que la cebolla puede reducir los niveles de azúcar en sangre. En concreto, un estudio de 2010 publicado en Environmental Health Insights, investigó el efecto hipoglucemiante de las cebollas rojas en pacientes con diabetes de tipo I y II, demostrando que el consumo de 100 gramos de cebollas crudas al día produciría una reducción significativa de la glucemia.

Varios estudios observacionales han asociado el aumento del consumo de cebolla con la reducción del riesgo de varios tipos de cáncer, como el de estómago, mama, colon y próstata.

La cebolla cruda es buena para el hígado

Los estudios demuestran que los componentes azufrados de las cebollas impiden el desarrollo y el crecimiento de tumores al proteger las células de las mutaciones e inducir la apoptosis (proceso de muerte celular programada).

Además, las cebollas contienen un mineral poco frecuente en los alimentos, el cromo, un oligoelemento esencial también útil para gestionar los niveles de azúcar en sangre y controlar y prevenir la diabetes.

La cebolla, junto con otras plantas como el puerro y el ajo, pertenece al género ALLIUM, de la familia de las liliáceas. Todos los miembros de este género contienen aceites terapéuticos con componentes sulfurosos que son en parte responsables de su inconfundible olor y sabor.

Las cebollas no deben guardarse en el frigorífico, pero una vez cortadas deben refrigerarse y consumirse lo antes posible para mantener intactos sus valiosos nutrientes. Sellar las partes ya cortadas en un recipiente hermético, separándolas de otros alimentos. Su fuerte olor y sabor pueden afectar al del resto de los alimentos.