Un negocio ganador nace de una idea ganadora. Pero, por desgracia, la idea por sí sola, por muy revolucionario que sea el producto o servicio que pretendes desarrollar y proponer, no basta para abrir un negocio. Crear tu propia empresa requiere planificación, disciplina e investigación. Pero, sobre todo, ¡necesitas dinero!
Hay varias formas de conseguir dinero para abrir un negocio, pero antes de preocuparte por cuál elegir, debes respirar hondo, mantener a raya momentáneamente tu entusiasmo y asegurarte de que tu idea es realmente concreta y monetizable.
Aquí tienes 5 pasos que te llevarán por el buen camino para interesar y convencer a alguien de que crea en tu idea, invierta en tu negocio y financie tu start-up.
Encuentra un mentor que pueda evaluar tu idea
Para convencer a alguien de que invierta en tu idea, tendrás que convencerle de lo buena que es. Pero, ¿lo es realmente? Primero tienes que estar convencido tú mismo, pero sobre una base objetiva y no sólo porque «es tu idea». A continuación, debe identificar a alguien que ya haya recorrido el camino que usted está a punto de emprender, alguien que antes que usted tuvo una idea, la desarrolló, encontró la financiación necesaria para lanzarla y alcanzó el éxito deseado. Alguien que pueda ponerse en tu lugar, pero que pueda darte una opinión objetiva, neutral y desinteresada.
Si no conoce a nadie con estas características, busque entre su red de contactos y conocidos, o asista a ferias, reuniones y talleres relacionados con su sector. Utiliza Internet y las redes sociales para encontrar blogueros, personas influyentes o expertos a los que puedas recurrir.
No temas pedir opinión y, sobre todo, no seas tan engreído como para temer que alguien te robe la idea. Una idea de negocio vale muy poco por sí sola, es su ejecución lo que marca la diferencia. Si todavía tienes reservas a la hora de compartir libremente tu idea, siempre puedes protegerte con un acuerdo de confidencialidad.
La mayoría de los empresarios experimentados están dispuestos y deseosos de compartir sus experiencias y, quién sabe, puede que incluso tengas un golpe de suerte y encuentres directamente a alguien dispuesto a invertir en ti.
Y si la respuesta es negativa, acéptala. Quizá sólo sea cuestión de ajustar algunos detalles y corregir la toma. O puede que simplemente haya tenido una idea equivocada, genial sobre el papel pero no en el mundo real. Paciencia, atesora la experiencia y, sin desanimarte, piensa en la próxima oportunidad que aprovechar. Aun así, habrás ganado algo en términos de relaciones, conocimientos y experiencia.
Analizar a fondo el mercado
Para convertir su idea en un negocio, es esencial identificar su mercado objetivo. Una vez que haya identificado su mercado objetivo, tendrá que «hacer los deberes» analizando los escenarios y tendencias del mercado, los hábitos y necesidades de la audiencia y la competencia existente.
Puede empezar haciéndose estas dos preguntas
¿A quién va dirigido mi producto o servicio?
¿Estarán los clientes realmente interesados en mi producto o servicio?
La primera pregunta corresponde al perfil de su público objetivo, identificando la edad, el sexo, el nivel educativo, la ubicación geográfica y otros datos. Cuanto más específico sea, mejor.
La segunda pregunta le ayudará a evitar perder tiempo y recursos (= dinero) para desarrollar y comercializar un producto que nadie comprará.
Hay muchas fuentes que pueden ayudarle a comprender las oportunidades y dificultades del mercado, y también tendrá que recopilar datos directamente de su público, mediante análisis de mercado que pueden implicar el uso de cuestionarios, entrevistas, valoraciones, grupos de discusión, pero también medios sociales y herramientas de medición como Google Analytics.
A menudo, estos datos ya han sido recopilados por otros de forma gratuita, sólo hay que saber a dónde dirigirse para consultarlos. Por ejemplo:
- Asociaciones profesionales
- Universidades
- Estadísticas oficiales
- Cámaras de Comercio
- Organizaciones y fundaciones de desarrollo empresarial
- Recursos en línea
Hoy en día, una forma estupenda de realizar estudios de mercado es a través del crowdfunding.
Determine cuánto capital necesita y elabore un plan de negocio
Los consejos de un mentor y tu propio análisis del mercado deberían haberte ayudado a tener una idea aproximada pero bastante realista de cuánto dinero necesitas no sólo para poner en marcha tu empresa, sino también para poder mantenerla hasta que empiece a generar beneficios.
El plan de empresa le servirá, en primer lugar, para trazar un rumbo y, en segundo lugar, para explicar a sus prestamistas o inversores cómo piensa utilizar los fondos obtenidos incluso después de haber puesto en marcha su empresa.
Lo importante es que sea claro, conciso y esté escrito con fluidez. A veces, una buena idea se descarta simplemente porque la persona que debía evaluar el plan de empresa lo desechó sin siquiera terminar de leerlo. Evite que esto le ocurra a usted.
Participar en licitaciones y concursos
Muchas grandes empresas y grupos multinacionales, así como administraciones públicas, bancos y grupos financieros convocan concursos o licitaciones para financiar y desarrollar ideas y negocios. Obviamente, exigen lo mejor de lo mejor, por lo que suelen ser competiciones muy duras y encarnizadas.
Para participar, obviamente tendrá que cumplir los requisitos, así que tómese su tiempo para leer y comprender las normas y condiciones. Los concursos pueden dirigirse a sectores específicos, a personas de edades o sexos concretos, a nuevas empresas o a empresas ya establecidas.
Las oportunidades que ofrecen las convocatorias pueden ser diversas. Desde subvenciones (premios) hasta coinversión por parte de la organización promotora, desde oportunidades de formación especializada hasta contratos y acuerdos de colaboración o distribución.
La participación en una convocatoria o concurso también puede servir de referencia y añadir valor a su idea.
Consiga el capital que necesita para poner en marcha su empresa
A estas alturas, ya deberías haber realizado los estudios de mercado necesarios, obtenido la opinión de tu mentor y definido tu plan de empresa. Ha llegado el momento de resolver la cuestión fundamental:
¿De dónde sacar el capital necesario para garantizar el crecimiento y los beneficios de su empresa?
Las opciones más comunes son:
- Financiación colectiva: El crowfunding le permite atraer el interés de diversos inversores, tanto a pequeña como a gran escala, hacia su proyecto. Como ya hemos mencionado, también puede resultar una excelente forma de investigación de mercado. Para tener alguna esperanza de que su idea no sólo suscite interés, sino que realmente reciba financiación, debe contar ya con una red de contactos y partidarios. De lo contrario, tendrá que esforzarse mucho para captar la atención de quienes aún no saben nada de usted ni de su idea de negocio.
- Préstamos financieros: El Préstamo Financiero, concedido por una entidad de crédito, te da más control sobre tu empresa, pero hay que estudiar detenidamente las condiciones de reembolso y las consecuencias en caso de retraso o impago de las cuotas.
- Inversor Privado: un empresario o profesional con patrimonio personal, contactos y espíritu aventurero, dispuesto a invertir en pequeñas y medianas empresas participando en el capital. Una especie de mecenas, por tanto, que ve en la start-up una posible fuente de retorno económico a medio y largo plazo. Por lo tanto, implica una relación más personal que un inversor de capital riesgo, y lo más probable es que tenga que aceptar cierta interferencia en la gestión de su empresa
Realizar un minucioso estudio de mercado para comprobar la validez de tu producto y contar con un plan de negocio detallado son pasos necesarios para el desarrollo de cualquier proyecto, mientras que la participación en convocatorias y concursos es una opción que mucha gente no se plantea pero que puede ser una valiosa oportunidad aunque sólo sea en términos de experiencia.