Como hacer una infusión de canela

La canela es una especia con muchas virtudes. Veamos cómo se puede utilizar para preparar sabrosas infusiones.
La canela es una especia muy aromática y sabrosa. Además de ser excelente para aromatizar pasteles y galletas, también puede utilizarse para preparar una infusión de canela, perfecta para los días de otoño e invierno.

Esta tisana no sólo tiene un gran sabor, sino que también tiene muchas propiedades beneficiosas. Veamos cuáles son y descubramos algunas recetas para preparar infusiones de canela.

Los beneficios de la infusión de canela

La tisana de canela, sobre todo si se bebe inmediatamente después de la comida, favorece la digestión y desinflama el estómago.

Té de hierbas con canela

La canela también tiene propiedades antibacterianas naturales, lo que la convierte en un buen remedio contra la gripe y los resfriados. Por último, esta especia estimula la circulación y tiene propiedades de calentamiento.

Canela: contraindicaciones

La canela, como todos los alimentos, no está exenta de contraindicaciones. En personas predispuestas, puede provocar reacciones alérgicas, incluso graves.

El consumo excesivo de esta especia provoca taquicardia, sudoración, convulsiones y diarrea. Por ello, no se recomienda tomar más de tres tazas de infusión de canela al día.

Cómo preparar una tisana de canela

La receta de la tisana de canela es muy sencilla. Todo lo que necesitas es una rama de canela (o una cucharadita de canela en polvo) y 125 ml de agua. Poner el agua en un cazo y calentarla en la cocina. Cuando rompa a hervir, apaga el fuego y añade la canela. Déjalo en infusión durante unos diez minutos, luego cuélalo y bébelo mientras está caliente. Para hacerlo más dulce, puedes endulzarlo con una cucharadita de miel. La miel y la canela hacen de esta infusión un excelente remedio contra la tos y los resfriados.

Otra infusión muy buena es la que se hace con canela, naranja y manzana. Para prepararlo, pon una rama de canela, 10 gramos de manzana seca, 10 gramos de naranja seca y 20 gramos de té negro en agua hirviendo. Deje que todo repose durante unos diez minutos, cuélelo y bébalo.