Alcobendas debate sobre la obligatoriedad de la tasa de basuras: La imposición de la Ley 7/2022 y la postura de la alcaldesa

La alcaldesa de Alcobendas, Rocío García Alcántara, ha reafirmado el compromiso del municipio de no aplicar la nueva tasa de basuras establecida por la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos Contaminados, impulsada por el Gobierno de España. En una sesión extraordinaria del Pleno, García Alcántara sostuvo que este impuesto, exigido a localidades con más de 5,000 habitantes, representa una medida injusta que obligaría a los ayuntamientos a cobrar por la gestión de residuos a comercios, viviendas y otras actividades en el municipio.

“En Alcobendas nos negaremos a cobrar esta tasa a los vecinos salvo que lo imponga la ley a partir de abril de 2025,” destacó García Alcántara, agregando que si el Gobierno reconsidera la obligatoriedad de la tasa, el municipio no aplicará este «basurazo».

Reacciones y votación en el Pleno municipal

Durante el Pleno, el Partido Socialista no presentó enmiendas sobre el tema, y la propuesta de Vox fue excluida por irregularidades legales. La decisión se aprobó finalmente por mayoría, resaltando el compromiso del consistorio en rechazar la aplicación de esta tasa, al menos hasta el último plazo permitido por la ley.

El Partido Popular (PP) y otros grupos opositores a la tasa han señalado que esta medida sería un «atropello» que afectaría económicamente a la población, generando a su vez una carga administrativa considerable. Asimismo, el Ayuntamiento ha solicitado que los municipios con cuentas saneadas, como Alcobendas, queden exentos de dicha tasa, permitiéndoles mantener métodos propios de financiación para la gestión de residuos.

Alcobendas y otros municipios frente a la tasa de basuras

Al igual que Alcobendas, otros municipios madrileños han cuestionado la aplicación de la tasa. Majadahonda, por ejemplo, ha pospuesto la implementación hasta 2025, mientras que San Sebastián de los Reyes ha aprobado reducirla a la mitad para amortiguar el impacto en la ciudadanía. Alcobendas ya había aprobado mociones en marzo y septiembre, junto al PP y Vox, para rechazar la obligatoriedad de la tasa, posicionándose así en contra de esta imposición centralizada y defendiendo su autonomía local.