La depresión post-sexual no solo afecta a las mujeres. De hecho, entre los hombres es más común de lo que piensas , lo que demuestra que incluso la sexualidad masculina es más compleja de lo que solemos pensar.
El término depresión post-coito o disforia post-coito (DCP) indica el síndrome con alteración del estado de ánimo después de las relaciones sexuales.
En inglés se le conoce con el acrónimo PD por la expresión «post-sex blues» precisamente por ese conjunto de emociones de tristeza, melancolía, irritación que muchas mujeres experimentan después del sexo.

 

Depresión postcoital: ¿por qué se produce?

Podemos definir  la depresión postcoital como una bajada repentina del estado de ánimo, tras el logro del orgasmo. Este declive se caracteriza por sentimientos fuertemente negativos como: soledad, melancolía, profunda tristeza, nostalgia, sensación de aislamiento, a veces angustia que puede conducir al llanto. Estos sentimientos de infelicidad y desesperación tienden a desaparecer en poco tiempo y no están directamente vinculados a la relación de pareja ni a la relación sexual en sí que, por el contrario, la mayoría de las veces es satisfactoria.

Cómo reconocer la depresión poscoital

    La depresión poscoito es fácilmente reconocible porque está directamente relacionada con el momento del orgasmo: si te das cuenta de que solo ocurre después de haber alcanzado el placer, si no hay razón para sentirte triste, si los sentimientos negativos no se vinculan inmediatamente a otras situaciones. (peleas, problemas de relación, estados de ansiedad en general), puede comenzar a pensar en tener la depresión sexual posterior. Para comprender si esto es realmente una depresión posorgasmo, es importante tener en cuenta cuándo ocurre. Si se revela solo durante las relaciones o incluso cuando estamos solos, si está presente solo en ciertas circunstancias, como después de una pelea o después de una relación particularmente satisfactoria, etc. Estos datos lo ayudarán a comprender cómo «trabaja» y lo ayudarán a encontrar la mejor manera de manejar su tristeza.

    Posibles Causas

    La tristeza posterior al sexo puede depender de una variedad de causas fisiológicas y psicológicas. Entre las causas fisiológicas pueden estar: la bajada brusca de la tensión sexual acumulada antes y durante el coito y la vertiginosa caída del pico de endorfinas alcanzado durante el orgasmo, que inmediatamente después provoca un momento de bajada antes de que se restablezcan los valores normales.
    A nivel psicológico, sin embargo, es posible que una fuerte ansiedad por el desempeño femenino (generada por querer alcanzar el orgasmo a toda costa o querer ser «buena» en la cama), provoque un fuerte colapso más adelante.